10.18.2010

Ira y revolución.

La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco lo entendemos, lo que hace que estemos muy cabreados.

-El club de la lucha.

PD: en breves volveré. No sé ni cómo ni con qué, pero lo haré.

10.06.2010

Lunívoro.

Deseándose en silencio. Entre risas, cojines y juegos de manos. Burdas excusas para comenzar una loca aventura. Sus miradas lo atraían, lo envolvían en un halo de seguridad. Sus palabras emanaban dulzura en cada sílaba que emitían. De su piel florecía sexualidad desde cada poro. Sus lunares parecían pedir ser devorados, eliminados de su cuerpo a bocados de pasión.

Y cuando sus labios entraron en contacto con los suyos, se oscureció el universo. La habitación quedó envuelta en una nube de deseo que los contagiaba de pies a cabeza. Cuando separaron sus bocas, se miraron a los ojos. A los dos segundos apareció una sonrisa en la cara de ambos, una muestra de amor y felicidad. Una prueba inequívoca de que el amor aún le tenía reservada una grata sorpresa.